A partir de los 12 años

  1. Solicitar

    La niña desdichada

    La niña desdichada

    Sin existencias

    COP $ 47.000

    Autor: Edward Gorey

    Editorial: Libros del Zorro Rojo

    Año de edición: 2010

    ISBN: 9788492412570

    Formato: Libro

    Terminado: Tapa Dura

    Tamaño: 16 x 14 cm.

    Número de páginas: 64

    Reseña: Las insuperables desgracias de una niñita huérfana y maltratada. Una historia extrema donde Gorey lleva hasta el límite suinteligente humor macabro y su refinada crueldad.

    Nota: Contiene Ilustraciones a blanco y negro. Impreso en papel esmaltado.

    Más información

  2. Solicitar

    El trópico de los caballos

    El trópico de los caballos

    Sin existencias

    COP $ 37.000
    Una jovencita busca su destino en un mundo de fantasía, librando poco a poco junto con un sabio mentor, una insólita aventura en medio de batallas contra seres extraños. Así, conocerá a personajes sorprendentes y vivirá situaciones divertidas y reflexivas, hasta culminar sorpresiva y heroicamente con su verdadera identidad. Los autores logran desarrollar un buen relato empleando muy bien los elementos del género de fantasía: con sus seres fantásticos, magia y paisajes paradisíacos... Más información

  3. Solicitar

    Hipatia de Alejandría - Hypatia of Alejandría - Ipazia d' Alessandria

    Hipatia de Alejandría - Hypatia of Alejandr...

    Sin existencias

    COP $ 76.000
    Escucharemos una historia verdadera, sucedida hace muchos años (más de mil quinientos), en un país famoso, Egipto. Por una calzada de Egipto, una primavera de hace muchos años, iban dos chicos y una chica. Eran casi mayores, el más pequeño tenía doce años y ella, la mayor, dieciocho. Pero no eran lo bastante mayores como para afrontar solos esa calzada situada en los bordes del desierto, larga, fatigosa y batida por salteadores de caminos.

    Los tres venían de la ciudad de Alejandría y querían ir a Cirene, ciudades dotadas ambas de un puerto excelente sobre el mar Mediterráneo. Pregunta: ¿y por qué no hacían los tres lo que hacía todo el mundo, que era viajar por mar, e iban, en cambio, por vía terrestre? y ¿por qué viajaban sin cabalgadura alguna, sin bastón y sin alforjas, llevando en bandolera tan solo un macutillo de ciudad? Sigamos adelante y quizá nos lo expliquen ellos. 
    Más información